¿Petróleo o Vida?
Por: Econ. Richard Vera Morán
Las últimas noticias de los cables internacionales, dan cuenta de la superación del precio del petróleo en más de 100$. Esto mismo ha causado preocupación en los países y empresas altamente dependientes de este recurso llamado también el "Oro Negro".
Es indudablemente quizás, materia de debate en el futuro la forma como sustituir el petróleo por otro combustible o energía. Ese es el caso del etanol, gas natural y biodisel, considerados combustibles limpios, por su poco impacto en el medio ambiente. Combustible renovable pero a la vez ecológico.
El problema radica en que gran parte de las empresas todavía mantienen maquinarias y equipos, muchos de ellos anacrónicos y que requieren del oro negro para su funcionamiento. Así mismo es casi imposible en el corto plazo, cambiar la estructura productiva y el otro problema sería la gran inversión en nuevas maquinas, que los empresarios no estarían dispuestos ha realizar dada la poca probabilidad de existencia de más petróleo hacía el 2050.
El problema no es de demanda, sino al contrario de oferta. Dadas los conflictos en el medio oriente, la invasión a Irak, el fracasado proceso de democratización, la muerte de la líder Pakistaní Benazir Buttho y otros contextos, los que han restringido críticamente el suministro del petróleo a nivel mundial. La otra variable problemática tiene relación directa con los pocos proyectos de exploración en territorios considerados petrolíferos.
¿Cuales son los efectos inmediatos de este exceso de demanda, frente a la limitada oferta?, la respuesta es clara, el precio podría subir aun más.
Los Árabes saben que una forma de contrarrestar la posición frágil de occidente, es disminuyendo su acceso al combustible fósil. De allí posiblemente podemos inferir, ¿como es que EE.UU invadió Irak y por que lo hizo?
En el caso peruano, la subida del precio del petróleo tuvo su impacto mediático en un incremento en la inflación anual peruana. Que se situó en 3.93%, pese que el BCR contaba con una proyección de 3% anual.
Este fenómeno se explica porque todavía el 53% de dependencia que tiene el Perú, con respecto al petróleo. La alternativa sería el mayor consumo de gas natural, energía que aún no se masifica, sobretodo en los sectores más populares.
Para ello el gobierno está solicitando al MEF la suma de 200 millones de nuevos soles, para incluirlos en el fondo de estabilización, cuyo objetivo es amortiguar el alto precio y que este fondo pueda no trasladar el alto precio del petróleo a los consumidores finales.
La pregunta sería: ¿Hasta cuando durará los 200 millones? ¿El Perú está en condiciones de financiarlo permanentemente?
Lo cierto es que variables externas, políticas y económicas, están disparando el precio a niveles solo comparables, como en el año 1973.
La gran lección para la humanidad, estaría por el lado de empezar a reflexionar cuan importante es crear un combustible renovable, acorde con el equilibrio del ecosistema y desechar al combustible caro y contaminante, como es el petróleo.
Esta tarea ahora le corresponde al estado, en su función de diseñar políticas que contribuyan al bienestar colectivo, a los empresarios industriales en su objetivo de promover producción con menor impacto ambiental y a la sociedad mayor concientización en un particular modo de vida, respetando las leyes naturales